|
|
 |
|
Primeros auxilios |
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Primeros auxilios

Dada la enorme actividad física que desarrolla un caballo, las pequeñas heridas, las rozaduras, los tirones y otros malestares físicos son algo habitual. Por lo general, estos problemas no revisten demasiada importancia y es posible atenderlos sin demasiadas complicaciones, aunque en otros casos es necesaria la presencia de un veterinario que pueda valorar su gravedad. En ambas situaciones hayq ue actuar con celeridad para evitar que las heridas se infecten y puedan ocasionar problemas mayores al caballo.
Pequeñas heridas

Son contratiempos a los que hay que enfrentrarse de forma habitual al tratar con caballos. Los cascos y las extremidades son los que suelen resultar más afectados y son zonas muy delicadas porque si no se atienden de forma adecuada, pueden impedir al caballo, incluso, mantener en pie.
Limpiar la zona es el primer paso que hay que dar. El agua fría es el mejor aliado para despejar la herida de la suciedad que haya podido contraer si se vierte con cuidado sobre la herida y, además, se consigue que los vasos sanguíneos se contraigan y deje de sangrar.
Una vez que la herida está limpia, puede valorarse su gravedad. En caso de que sea imprescindible aplicar puntos, deberá acudir un veterinario. La mejor ayuda que se le puede brindar es vendar la herida para protegerla hasta que él llegue.
Por desgracia, no siempre ocurren los percances cerca de la cuadra, por lo que es preciso avaluar la situación y ver si el caballo podrá volver por su propio pie. De no ser posible, o de existir alguna duda, es preferible solicitar un medio de transporte.
Si se trata simplemente de una herida superficial, se puede proceder de la siguiente manera:
1.- Lavar con agua fría toda la zona de la herida.
2.- Con una gasa limpia, limpiar de dentro hacia afuera, retirando los restos de suciedad.
3.- Utilizar jabón desinfectante.
4.- Cuando esté limpia, usar solución salina.
5.- Aplicar una pomada de cine que la ayude a regenerarse.
Con esto se impide que la herida se infecte, a la espera de la llegada del veterinario.
Si hubiera pequeñas astillas de madera o trozos de metal incrustados en la herida, sólo deberá retirarlos el veterinario. En este caso no hay que apretar ni tapar la herida, con una limpieza será suficiente, eso sí, cuidando bien de no tocar el cuerpo extraño para no agravar la situación. Mientras se espera la llegada del profesional es conveniente revisar las fechas de la vacuna de tétano, por si hubiera que volver a ponerla.
Aplicar un vendaje

No importa lo grande que sea una herida, siempre se debe trabajar de dentro hacia afuera.
Lo primero siempre es limpiar toda la zona con una gasa limpia y una solución salina cuidando con el polvo y la suciedad no se introduzcan por debajo de la piel levantada. También conviene ir cambiando el algodón para no llevar la suciedad de unas partes a otras de la herida. Usar una pomada que se adsorbe con celeridad para que no se pegue y evitar que, al retirar el apósito. En ambos casos, después debe procederse de la siguiente manera:
1.-Envolver la pata con una almohadilla. Es posible que la herida siga sangrando. Es normal que lo haga, como máximo, una media hora.
2.-Sujetar la almohadilla con una venda comenzado por la parte superior, envolver hacia abajo y no escatimar en venda. Lo más adecuado es poner una capa completa a la pata en cada vuelta.
3.-Es conveniente dejar bien visibles los bordes superior e inferior de la almohadila.
¿Cuando hay que llamar al veterinario?

Aunque en algunos casos se puede actuar por cuenta propia y sin riesgos para la salud del caballo, en otras circunstancias se vuelve imprescindible la presencia del experto oara garantizar una recuperación más rápida y segura del animal. En caso de duda sobre si es o no necesaria la presencia del veterinario, se debe tener en cuenta que conviene llamarlo siempre que se observen los siguientes síntomas en el animal:
*Muestra un carácter extraño.
*Sangra en abundancia y no se detiene la hemorragia.
*Se muestra dolorido, se tumba y no quiere levantarse.
*Se queja de forma reiterada por algún dolor y no hay forma de calmar al animal.
*Se tambalea visiblemente al caminar, parece como atontado o pierde el equilibrio.
*Su temperatura sobrepasa los 38 ºC.
*Tiene una salivación abundante.
Colocar una venda de reposo.

En este caso no se trata de curar una herida, pero este tipo de vendaje resulta muy beneficioso para el animal, tan sólo requiere que se coloque de forma correcta, y sobre protecciones acolchadas, para que realmente resulte útil. Es importante recordar que no debe llevarlo más de 12 horas. Es posible que al principio sea necesario repetir el proceso un par de veces hasta conseguir situarla a la altura correcta. La venda hay que colocarla con precaución. Si no se sabe hacer, es mejor no ponerla.
Antes de comenzar, hay que fijarse que la venda esté enrollada en la dirección correcta, es decir, que esté lista para ser desenrollada. Se puede saber por la dirección del velcro.
1.- Colocar la parte del borreguillo abrazando la pata y procurando que no haya arrugas. La parte que cierra debe quedar en la dirección del vendaje.
2.- Todo el vendaje debe tener la misma tensión. Hay que comenzar por arriba, dejando que se vea un poco del borreguillo. La altura ideal es justo por debajo de la rodilla.
3.- Poner al lado del caballo y apretar siempre en el mismo punto. Lo mejor es hacerlo por los lados, ya que adelante y detrás están los tendones.
4.- Se va bajando con la venda hasta que se cubre el corvejón.
5.- Cuando se llega al final de la pata, se repite la operación, ahora subiendo. Para comprobar que está bien colocada, por delante tiene que verse una especie de cruz formada por la bajada y la subida.
6.- Arriba se cierra con el velcro, o bien atando la venda. El borreguillo de arriba se puede doblar por encima del cierre para que ajuste más, pero el de abajo, no.
Un consejo: si antes de comenzar, el borreguillo se moja en un cubo con agua fría, el vendaje surtirá más efecto.
Agua en las orejas

Es muy importante saber que el caballo no puede recibir agua de forma directa en las orejas. En caso de que le entrase, le provocaría una pérdida completa del equilibrio, llegando a desplomarse de forma inmediata. Se debe prestar especial atención a la hora de asearlo y, en caso dw que ocurra, secarle la zona con prontitud.
Tomar la temperatura sin termómetro
En algunas ocasiones, el caballo puede tener reacciones extrañas que no se sabe muy bien a qué achacar. La respuesta puede ser tan sencilla como descubrir que tiene fiebre. Si ocurre lejos de la cuadra, es posible que no se tenga un termómetro cerca, pero averiguarle es fácil. Tan sólo hay que tocarle las orejas. El hecho de que estén calientes es un síntoma de fiebre. Antes de alarmarse, hay que ver si es posible que estén calientes debido a otras causas, aunque lo que es seguro es que si están frías no hay fiebre.
La falta de agua
El agua es muy importante para el bienestar del caballo. Necesita beber con cierta frecuencia, en especial tras realizar esfuerzos importantes, aunque a veces no es posible y debe esperar un tiempo. Para comprobar si el caballo llega a estar deshidratado, sobre todo en verano y en zonas muy calurosas, se le puede realizar la prueba del pliegue de piel. Consiste en pollizcarleen un lado del cuello con un giro. Si la piel se recupera inmediatamente, está bien. El hecho de que tarde más de tres segundos en volver a su posición es un síntoma de que está deshidratado. En este caso, hay que tratar de darle abundante agua a la mayor brevedad posible e, incluso ducharlo.

Tras las rozaduras
Algunas zonas más propensas a sufrir rozaduras producidas por la cincha. Una vez que la heridaestá curada, puede aplicarse linimento que provoca un endurecimiento de la piel.
Los tirones
Se producen cuando el caballo da un mal paso. Estos tienen más posibilidades de ocurrir cuando galopan o saltan en terrenos demasiados blandos.
Es una de las dolencias más temidas de las que puede sufrir en las extremidades, ya que puede afectarle a cualquiera de ellas y provocar que el caballo esté parado desde un año hasta toda su vida.
En caso de que le ocurra, hay que aplicarle hielo en la zona y dejarlo descansar. El veterinario debe acudir para evaluar el tiempo de reposo que debe mantener el caballo y para intervenir como considere oportuno, por lo general, aplicando un vendaje anatómico que presione de manera uniforme.
La importancia de un buen botiquín

Al tratar con caballos es muy importante poder disponer de un botiquín con algunos útiles para hacer frente a las pequeñas heridas o indisposiciones que presente el animal. Incluso aun cuando sea necesaria la presencia del veterinario, una intervención acertada a tiempo ahorrará sufrimiento y puede incluso salvarle la vida. El botiquín ha de estar limpio y ordenado para actuar con presteza y todos los encargados del caballo deben estar al corriente de su ubicación y contenido.
Para que un botiquín sea completo debe tener:
*Aceite de ricino.
*Agua oxígenada (solo se debe usar si lo autoriza el veterinario).
*Algodon y gasas estériles.
*Antiséptico y yodo.
*Apósitos.
*Almohadilla congelada.
*Esparadrapo.
*Gasa.
*Glicerina en pomada.
*Guantes.
*Jabón desinfectante.
*Pinzas.
*Sulfato de magnesio.
*Termómetro.
*Tijeras.
*Toalla.
*Vaselina.
*Venda adhesiva elástica.
*Vendas de distintos tamaños.

|
visitas 27824 visitantes hourselatina.es.tl. |
|
|
|
|
|
 |
|
Autores: |
|
|
|
|
|
|
Luis Ramón Pieruzzi
Lavinotintosoyyo@hotmail.com
Juan Carlos Velez
Juancarlosvelez11@hotmail.com
www.hourselatina.es.tl
hourselatina@hotmail.com |
|
|
|
|
|
 |
|
publicidad disponible |
|
|
|
|
|
|
.........Disponible.........
.........Si quieren poner su publicidad.......
........envienos un correo..... |
|
|
|
|
|
 |
|
publicidad disponible |
|
|
|
|
|
|
.........Disponible.........
.........Si quieren poner su publicidad.......
........envienos un correo..... |
|
|
|
|
|
 |
|
¡ videolatina ! |
|
|
|
|
|
 |
|
! Chat latina ! |
|
|
|
|